- Si, te escucho.
- Bueno... Empecemos.
- Cuando quieras.
- Ayer.. Jugabas con muñecas, gustabas de un chico, te probabas la ropa de tu mamá, pensabas en qué te gustaría ser, caminabas de la mano de tus padres, pedías que te contaran un cuento.
- Pero... Hoy.. Valoro la amistad, estoy enamorada, elijo mi propia ropa, soy la clase de persona que se siente cómoda con sí misma, me siento independiente. Escribo la historia de mi vida. El amor me izo conocer la tristeza, la esperanza, los temores, las ilusiones, la angustia, la confusión, los dolores, la ansiedad. Pero la amistad me ha dado la confianza necesaria para ser feliz.
- Entonces.. Se podría decir que estás bien encaminada a cumplir tus sueños? Que sos una persona feliz? Tus sueños tenían trenzas de pelo largo, maquillaje de juguete en el bolsillo, manos pegoteadas de caramelos. Eran sueños pequeños..
-Si los eran, pero han crecido, igual que todos lo hacemos. Mis sueños hoy tienen desconfianza, inseguridad, llantos. Mis sueños tienen destellos en los ojos, marcas en los brazos, colores diferentes...
- El tiempo te ha vuelto mayor pero de vos depende que crezca tu alma.
- No dejes nunca que nadie, absolutamente nadie, te diga que no eres hermosa.
- Bueno, eso fue todo.
- Calculo.. Por último, un consejo..
- Si?
- Carpe Diem.
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